jueves, 27 de septiembre de 2012


Prudencio Exojo (@exojo) //   

 2047

Conocimos en Barcelona la manifestación de 1977. Era el referente hasta la fecha.
Multitudinaria, reivindicativa, pacífica, numerosa y punto de partida para … aún no sé qué,
pero trataremos de averiguarlo.
Han pasado treinta y cinco años y la evolución del sentimiento nacionalista en Catalunya,
ha sido evidente. Se partía cuasi de cero. En estos treinta y cinco años, se han construido
todas las estructuras, elaborado normas, publicadas leyes y puesto en funcionamiento los
mecanismos y estrategias necesarios para conseguir las metas establecidas.
En 1977, las reivindicaciones fueron unas determinadas, como por ejemplo, l ´Estatut.
¿ Por qué no se pidió algo más ? Parafraseando a Jordi Pujol, “ Això, ara, no toca “. Eso,
ahora, no toca.
Estoy convencido, y el lector maduro que peine canas cincuentonas, sabrá perfectamente
que no tocaba. Había miedo, respeto e incertidumbre por el futuro político y democrático
de nuestro país. Para muestra un botón y en febrero del 1981, tuvimos ocasión de ver
hasta el ojal.
Han pasado treinta y cinco años y en estos momentos, la manifestación del pasado día
11, fue contundente y monotemática. Catalunya, nuevo estado europeo.
Sabían que no era posible. Sabían que no era viable. No sabían, ( la mayoría de
manifestantes ), lo que comporta la segregación. Pero lo solicitaban.
Ahora no hay los miedos políticos y democráticos del año 1977, pero, si hace treinta y
cinco años reivindicaban una cosa, queriendo otra, ¿ qué me hace pensar en esta
ocasión que lo reivindicado – aún teniéndolo por imposible – , no lo estimarán viable en un
futuro a medio plazo ?
Si aplicamos la proporcionalidad, puede que sea el tiempo necesario para adoctrinar a la
parte del electorado que, todavía, no tiene certeza de un voto independentista. Dos o tres
generaciones más y los objetivos serán alcanzables. Seguro.
Tras la reunión de Madrid, hay disparidad de criterios. Si se fija el punto de mira en la
prensa de ámbito nacional, división de opiniones. Si, por contra, uno fija la lectura en la
prensa local catalana, – incluidos los partidos con posiciones más radicales – , incluso
abogan por el inicio de un camino sin retorno.
A la hora de escribir esta colaboración, se sabe que el referente podía ser una especie de
Estado asociado, a imagen y semejanza de Puerto Rico.
El PSOE, tras gobernar durante amplias legislaturas sin mover ficha, ahora, ha
descubierto el Federalismo mal llamado ” maragalliano “, puesto que la acuńación del
término, le corresponde en verdad al socialista Obiols y, además, han descubierto el
federalismo incluso asimétrico.
Cuando el referente es EE.UU, y el demandante de turno exige ese Federalismo, no
habrá nadie que reflexione y se pregunte qué político, Gobernador o autoridad, por alto
rango que ostente, se le ocurre cuestionar las decisiones del Tribunal Supremo de la
Corte americana ?
En un Estado Federado, al margen de las condiciones impuestas por la Federación,
nadie, absolutamente nadie, cuestiona la autoridad de sus Tribunales, Policía, Servicios
de Seguridad y cuantos estamentos jurídicos están por encima de la autoridad
departamental. En EE.UU, da igual por qué frontera acceda Vd. En todas, tendrá el mismo
trato y consideración, – que no tiene por qué ser benevolente.
¿ Recuerda el lector las interpretaciones sesgadas, partidarias, partidistas, oportunas y
desafortunadas, emitidas por diferentes políticos autonómicos, acerca de algunas
sentencias de nuestro más alto tribunal ?
Entonces, quiere esto decir que, ni la legislación estatal, ni los tribunales nacionales, ni las
normas que emanan de nuestra Cámara, sirven en todos los casos, – cuestionadas
únicamente cuando sus sentencias no son favorables a los intereses partidistas -, porque,
si supieran que un Tribunal Constitucional español, pudiese emitir sentencia favorable
para la segregación, seguro que acudían gustosos a él.
No podemos tropezar siempre contra la misma pared, y ésta, no es otra que la
Constitución Española vigente, sentenció el President de la Generalitat el día de la
reunión con el Presidente del Gobierno Español.
Cambiémosla.
Adelante. Mañana mismo.
Pero miren, la propuesta que yo hago es, cambiarla radicalmente; tanto, que también
modificaría nuestra Ley Electoral, eliminando la representatividad de los partidos
nacionalistas en la Cámara Baja, porque, pregunto, qué hace un Grupo Parlamentario
Catalán, ( 16 escaños ) y Grupo Vasco ( 5 ) escaños, sin contar el Grupo Mixto, en un
Parlamento que no considera legítimo ? Pues cambiemos la legislación y retraigamos su
representación parlamentaria al ámbito que les corresponde, el autonómico.
La solución, cuando hayan pasado otros treinta y cinco años. En 2047.
Nota del autor
Por razones personales y de trabajo, cuando puedo, esta colaboración periódica, la dejo
preparada y lista para enviar a la redacción el día antes del cierre, sin importar la hora y el
lugar donde me encuentre. Esta semana, lo hice el lunes por la noche, incluso a
sabiendas que podría haber importantes novedades en Catalunya.
Así ha ocurrido y, sin embargo, entiendo no desvirtúa el espíritu del mismo. Al contrario,
refuerza claramente la teoría.

jueves, 20 de septiembre de 2012



Prudencio Exojo (@Exojo) //    Vivimos en una casa ubicada en una parcela que, sinceramente, no sé cuándo la compraron mis progenitores. Hace muchos años. Muchos, muchísimos… tal vez siglos.
No es muy extensa, pero si lo suficientemente grande como para que podamos vivir holgadamente toda la familia, disfrutando del paisaje y un entorno multicolor. La parcela, dispone de un edificio muy peculiar. Pensada originalmente como vivienda única, con posterioridad, hicimos reformas para acoger a todos los nuevos miembros de la familia.
Sé y me consta, que no fue tarea fácil tanto el mantenerla, como cuidarla. De verjas afuera, los asaltantes de caminos, bandoleros, gentes de distintas raleas, vagabundos y menesterosos, intentaron en más de una ocasión violar la propiedad.
Lo intentaron, pero no lo consiguieron.
Con el esfuerzo común, aportando toda la familia los recursos que cada uno generaba, construimos un hogar, modesto y humilde, pero acogedor.
Poco a poco, con el pasar del tiempo, fuimos progresando. Renovamos las instalaciones, habilitamos todos los servicios posibles, se hicieron reformas, modificaciones, siempre con el fin de mejorar la habitabilidad y el confort de nuestro hogar.
La familia se ampliaba. Asistimos gozosos al nacimiento de nuevos miembros. Siempre creímos que había espacio para todos, buscando un hueco donde fuera menester, pero nunca fruncimos el ceño ante la llegada de uno más. Creíamos – felices y risueños – , que nuestro hogar podía y debía dar cobijo a todos. Así pues, con el esfuerzo común, actuando todos como un frente unido, nos pusimos manos a la obra y ampliamos habitaciones, para que todos pudieran vivir con cierta tranquilidad e independencia.
Habitaciones bien comunicadas entre si, con el fin que ninguno de los miembros de la familia, llegado el caso, tuvieran excesivos problemas en socorrerse los unos a los otros.
El tiempo transcurría con más o menos normalidad, pero los chicos, – ley de vida – , fueron creciendo.
Unos, con sus cuitas y rarezas. Otros, con gustos diferentes a éstos; aquéllos, con peculiaridades concretas pero, en general, a la hora ritual del almuerzo o la cena, reunidos en torno a la mesa principal, aunque se discutía frecuentemente, siempre había un punto de inflexión donde, con mayor o menor consenso, toda la familia comprendía que éramos una piña. Que las adversidades, las superaríamos mucho mejor todos juntos.
Pasaron los años y aquellos adolescentes imberbes, tras pasar de puntillas por una pubertad acicalada de dosis revolucionaria, alcanzaron la mayoría de edad; el ímpetu, la fuerza de la juventud les hacía creer invencibles ante la adversidad.
Era imposible retenerlos en casa y eso, trajo consecuencias inevitables, las normas de convivencia, se vieron alteradas sensiblemente.
El mayor, intentó imponer su particular forma de vida. Una actityud, que en nada se correspondía con los usos y costumbres vistos en casa desde su nacimiento. Los hermanos pequeños, mientras no gozaron de la mayoría de edad, comprendían que no podían exigir lo mismo que su hermano.
Pero crecieron también, – lógico -. Se hicieron adultos y las reivindicaciones sociales, familiares, personales, ciertas exigencias de unos derechos que no siempre eran concretados, tangibles ni justos para con su familia – , empezaron a ser ostensibles.
No se trataba de analizar si justas o no; simplemente, actuaban por mimetismo, ( vaya Vd. a saber si por despecho ), con respecto al hermano mayor.
Como progenitores, en un principio, actuamos con benevolencia, creyendo que el diálogo y la comprensión de sus reivindicaciones, daría el mismo resultado con todos. No creímos nunca que la violencia sirviese para domeñar el espíritu juvenil y revolucionario del mayor, pero, aunque en una ocasión me enfadé muchísimo e intenté imponer mi autoridad paterna, con cierto abuso de la fuerza, tal vez, no fui consciente que los hermanos pequeños se apuntarían al mismo “ carro “, simplemente, como antes decía, por no ser menos que el mayor. Ya se sabe que en la pubertad, todos hemos querido ejercer de hombrecitos, parecer y aparentarlo, aunque en multitud de ocasiones, con el paso del tiempo, acertemos a reconocer que éramos más inconscientes, atrevidos e ignorantes de lo que en un principio suponíamos. Consecuentemente, esa actitud, hizo casi casi insoportable el desorden y el caos que teníamos en casa.
Se cumplió otra etapa y, como es ley de vida, comenzaron a salir y alternar con gente de su edad.
Emparejaron. Algunos, con mayor o menor fortuna, pero, nuevamente, se ponía en evidencia la cordura y el sentido de la responsabilidad familiar. Aquella casa, aquel hogar, volvía a ser el lugar común para todos, donde la mayoría, tras negociar como buenos hermanos, siempre encontraban un punto en común para considerar el hogar paterno, la casa de todos.
Con el paso del tiempo, sería prolijo enumerar las causas – yo tengo algunas, pero los hijos argumentan otras bien distintas -, empezaron a exigir unas condiciones de vida fuera de todo orden establecido, queriendo imponer unas normas que nunca serían alcanzables, entre otras razones, porque en casa, jamás habían visto un desorden como el que pretendían imponer. Ellos sabían perfectamente que entre todos, podríamos mantener la vivienda y nuestro hogar, en condiciones óptimas, pero destruirla, no sería el mejor futuro para toda la familia.
Ya sé que al mayor, la decoración del comedor no le hace mucha gracia. Es cierto, está ambientado con cierto estilo neoclásico y él, se considera muy moderno. No es que tenga nada en contra de sus gustos, pero no es de recibo que quiera imponer, allí donde todos formamos un conjunto armónico, unas ideas decorativas que rompen con todos los moldes y esquemas de la familia.
Aunque no fuéramos conscientes, poco a poco, le fuimos permitiendo que implantara elementos ornamentales particulares, ¡¡ vamos, al gusto suyo !!. Aceptamos incluso, que horadase la pared, para colgar determinadas obras modernistas que, si bien rompían el conjunto arquitectónico y ornamental de la casa, por no verle enojado una vez más, decidimos dar por buena su ubicación.
Así convivimos una buena parte de nuestra existencia. Creo, y considero, que con bastante buena armonía.
Desconozco qué profundas razones le han hecho cambiar de pensamiento. No sé yo, si la influencia de compañías y amistades que no mantienen los mismos valores e ideales, han podido influir en su mentalidad y forma de pensar. La cuestión es que, el otro día, vino a casa y dijo que no aguantaba más. Que tapiaría la puerta de su habitación, para no acceder al interior del hogar, intentaría abrir un boquete en la ventana, convirtiéndola en una especie de puerta de salida para acceder al exterior y que no quería saber nada de nosotros.
Vamos, que a sus padres, su familia, la que durante toda la vida, desde el mismo día de su nacimiento le ha cuidado lo mejor que ha podido, colmándole de todos los caprichos y bienestar posibles, ahora, los repudia y pretende iniciar una vida nueva, en solitario.
No he querido imponer la fuerza. Sé que como padre y progenitor, tengo y puedo ejercer labores disciplinarias para que no sea así, pero, a pesar de todo, pretendo que sea comprensivo, dialogando con él, pensando, creyendo y esperando que al final, posiblemente, cuando le haya pasado el enojo, comprenderá que está equivocado.
Le he dicho, entre otras razones, y le he intentado hacer ver que la vivienda, está construida de acuerdo con una normativa y legislación concreta y específica. Los planos de la casa, están depositados en el Instituto Nacional de la Vivienda, siendo construida de acuerdo con ese proyecto, visada por el Colegio de Arquitectos y, en definitiva, al amparo de la legislación vigente en aquél momento.
Le he hecho saber que, la Ley de Propiedad Horizontal no permite segregar la vivienda, ni tampoco la división interna de la misma. Tenemos servicios comunes de los cuales, él quedaría aislado. Es ilógico salir al campo por una ventana, dar la vuelta y tener que volver al interior para hacer uso común de la cocina, el comedor, la sala de estar, el cuarto de baño, la despensa, etc. etc.
Ahora, de una forma repentina, le ha dado por decir que no le queremos y eso, es rigurosa y totalmente falso. Repito, es una falacia. Nunca hemos tratado de una forma discriminada a ninguno de nuestros hijos.
Todos hemos hecho un gran esfuerzo para que él, como primogénito y hermano mayor, pudiera tener unos estudios universitarios, una preparación que, tal vez, los demás miembros de la familia, por razones diversas e injustificadas, no han podido disfrutar. En definitiva, en la actualidad, goza de un bienestar económico que otros hermanos no disponen. Es cierto que se ha sacrificado, es verdad que ha resultado muy trabajador, pero también es cierto que todos hemos puesto nuestro granito de arena para que él, pudiera gozar de ese privilegio. En el fondo, como primogénito, siempre creímos que podría ser un buen cabeza de familia.
Algunos padres, vecinos de casas cercanas, ubicadas próximas a nuestro entorno, me recomiendan que temple la situación de la mejor manera posible, pero, también es cierto que él, se siente firme en su rebeldía porque otros le reconocen un cierto valor para protestar.
La cuestión, es que se me ha planteado un conflicto en casa y no sé cómo resolverlo.
Por la fuerza, hoy en día, no es el camino más acertado.
Ahora bien, que vaya diciendo por ahí que en casa no se le quiere, eso, es totalmente falso.

viernes, 14 de septiembre de 2012


  
                                         TIRANDO A DAR 

Prudencio Exojo - @exojo


I.E. Menéndez Pidal

Fue noticia en el mes de Junio, pero quiero evocarla hoy, precisamente. 

Ayer empezó el curso escolar 2012/13 en Catalunya. La Fiesta de la Diada, retrasa siempre unos días el inicio del curso respecto de otras Comunidades Autónomas y, ayer, la Institución Escolar Menéndez Pidal no abrió sus puertas. Ni lo hará nunca más. 

Al finalizar el curso pasado, se anunció oficialmente el cierre del Centro. 

El descenso en la inscripción de nuevos alumnos, la insuficiencia económica para superar los costes de explotación, han hecho inviable su continuidad. No es frecuente el cierre de colegios pero, actualmente, el trasvase de alumnos a la escuela pública, la situación de crisis agonizante en las economías familiares y, tal vez, el bajo indice de natalidad, han provocado el cierre de la Institución.  Vienen a ser las tres razones que su Directora ha dado públicamente y yo, lejos de opinar del éxito o fracaso en su gestión económica y financiera, estoy por aceptar la versión. 

El Centro, ubicado en una barriada, nutrida antaño por emigrantes llegados de cualquier provincia de nuestra geografía, vivió sus mejores años en la década comprendida entre los años 1965-75. Centenares de alumnos, - niños y adolescentes - poblaban sus aulas en cualquiera de las especialidades impartidas. Clases diurnas, E.G.B., Bachillerato, Técnicas Mercantiles ( popularmente conocido con el nombre de “ Comercio “ , enseñanza ésta, que habría las puertas del mundo laboral, donde con 14 años podías y debías iniciar el rodaje en cualquier empresa, bien de aprendiz, bien de meritorio o con la popular y uniformada categoría de botones en la banca. 

Un bachillerato nocturno, clases particulares  de taqui/mecanografía, conformaban el amplio horario de la Institución, abierto desde las 9 de la mañana, hasta las 21 h. 

Además de la plantilla fija y los puestos de trabajos indirectos, el Centro, daba vida al barrio, además de la suya propia. En torno suyo, nacieron pequeñas tiendas, se nutrían algunos negocios básicos de barriada y en su conjunto, giraba una buena parte de la actividad cotidiana. 

No hay razones de crítica para dedicarles esta colaboración. Más allá del análisis y estudio del por qué, me impulsa el sentimiento de ser el Colegio dónde recibí el núcleo básico de mi formación. 

Desde la apertura de la Institución, hasta el día de hoy, siempre hubo matriculado algún miembro de la familia. 

Puede parecer un exceso sentimental, una nostalgia fuera de lugar, pero, ha desaparecido una parte de mi vida. 

viernes, 7 de septiembre de 2012


                                                 TIRANDO A DAR


Prudencio Exojo @exojo


CPB


Si no está muy familiarizado con las siglas, - y aunque lo esté -, será complejo identificar a qué Organismo me refiero. Ahora bien, si le aclaro que tengo especial interés en conocer el resultado de los comicios en Holanda, su actualidad económica y, sobre todo, la situación financiera de sus partidos políticos, posiblemente, ya sepa que me estoy refiriendo a la Oficina Central de Planificación, CPB, por sus iniciales en holandés, Centraal Planbureau.

Me cautiva Holanda por algunas particularidades. Claro está, no es por su climatología y otras actividades autorizadas y consentidas. A pesar de ello, admito que no cuesta comprenderlos y admirarlos, bien por su visión modernista de la sociedad, puede por  su frenética actividad marítima comercial, - a pesar de su limitada costa -, bien por la eficacia administrativa demostrada, haciendo de la necesidad virtud, luchando y venciendo sus dificultades climáticas y, claro está, por ser un país abierto al crecimiento exterior y la aventura empresarial. 

Algunas visitas y otras tantas relaciones comerciales, me permiten opinar en primera persona. Siempre he tenido la sensación que actúan con seriedad, respeto por el cliente o proveedor y, sobre todo, formalidad germana en el cumplimiento de plazos. 

Su Cámara, está formada por ciento cincuenta parlamentarios procedentes de seis representaciones distintas. Una de ellas, un tanto testimonial, pero con presencia al fin y al cabo. Las cinco restantes, conforman las mayorías parlamentarias, debidamente coaligadas según miren a izquierda o derecha del espectro político. 

El CPB, es un organismo de control al cual, voluntariamente, los partidos políticos someten su programa. Es obvio, no presentarlo, desacredita de una forma instantánea y,  la oposición, torpedeará sin piedad durante la campaña electoral, al partido y programa ausente.  

Hacerlo, siendo incoherente, puede ofrecer situaciones comprometidas y embarazosas a sus líderes, puesto que en cualquier medio, ya sea prensa, radio o televisión, se le interrogará acerca de la “ imposibilidad “ de llevar a cabo la teoría recogida en el programa, acorde con el informe previo, emitido por el Organismo Central de Planificación. 

Publicados los programas y los informes, el ciudadano, de un vistazo, mientras toma café en casa, juega una partida de billar en un Coffe Shop, contempla sus campos de tulipanes, o admira plácidamente el  molino más cercano, puede hacerse una idea de la veracidad del programa político de su partido, la irresponsabilidad del contrario, la incertidumbre futura de aquel otro o, cuando menos, contrastar la realidad y observar que con ninguno de ellos, tendrá crecimiento el país y su economía, será constreñida en los próximos ejercicios.

Como el informe contempla no sólo la viabilidad, si no las consecuencias directas e indirectas del programa, con especial atención a la economía interior, crecimiento del PIB, aumento o reducción de la tasa de desempleo, etc., el ciudadano, medianamente interesado en el futuro de su país, podrá ejercer el sufragio con un conocimiento de la realidad, teniendo certezas,  que para nosotros quisiéramos en más de una ocasión.

No hace falta reseñarlo. Los desvíos en porcentajes de hasta un 300 % sobre  obras  o servicios presupuestados, son más difíciles que se produzcan, las falsas promesas de creación de empleo, se desvanecen y, por tanto, el rigor económico para establecer una ratio de impuesto/ciudadano, se acerca mucho más a la realidad. 

Se creó en 1945 y desde 1986, ejerce su labor de control. No estaría mal que en nuestro país,  los partidos políticos tomaran buena nota.